Es un sentimiento extraño.
Como de juguete viejo, usado y raído, castigado en un rincón y olvidado durante años en un desván mientras coge polvo. Abandonado entre cajas y muebles que nadie toca desde que se pusieron allí. De vez en cuando un rayo entra por la ventana iluminando aquel trasto viejo un par de horas, dejando ver que la suciedad no es más que polvo que se acumula alrededor.
Es...
Como cuando te sientes a gusto en un lugar, pero tienes que marcharte, y al volver años después te das cuenta de lo diferente que es. Y aunque sientes que perteneces a ese sitio, y le tengas cariño, te encuentras fuera de lugar. Quizás porque tú también has cambiado.
Como si vieras el mundo a través de una burbuja, donde todo cambia constantemente. No puedes salir, y nadie puede entrar. Pero observas como todo lo que te rodea sigue cambiando con el paso del tiempo. El mundo no deja de girar, el sol no deja de salir, y la luna no deja de esconderse. La gente no deja de enamorarse, de caminar, ni de respirar. Nada ni nadie fija la vista en tu caja de cristal, mientras tú sigues atrapada dentro. Inmóvil. Sola, tú y tus pensamientos. Tus miedos, tus monstruos, tus demonios, tus pecados, tus frustraciones y tus imperfecciones. Sobre todo éstas últimas. La mejor compañía. Y como si cada uno respirara por sí mismo se te va acabando el aire, ahogándote, durmiéndote por la falta de oxígeno...
Es un sentimiento extraño.
Pero el mundo no deja de girar, el sol no deja de salir, y la luna no deja de esconderse.
viernes, 15 de noviembre de 2013
viernes, 8 de noviembre de 2013
De momento...
De todas esas las veces que pude marcharme, siempre decidí quedarme. Siempre, menos hoy.
Hoy me doy cuenta de que el problema era yo: por no querer ver. Por no dejar ir algo que yo creía que me pertenecía cuando en realidad nunca había sido mio. Aunque había estado cerca. Una falsa sensación de tener el mundo a tu alcance, esperando a que tú decidas cogerlo. Pero falsa al fin y al cabo.
Hoy me doy cuenta de que estoy exactamente donde tengo que estar, aunque haya perdido muchas cosas en el camino. Aunque una de esas cosas fuese yo misma, una parte de mi que no voy a recuperar, de momento...
Y sobre todo hoy me doy cuenta de que no merece la pena estar luchando en una guerra que no es la mía.
Ahora deambulo sin rumbo, abriéndome paso entre las balas. Con mi traje de "no me importa" recién estrenado. Peleando si hace falta a base de mordiscos en medio de la oscuridad de tantas noches de insomnio. A ver quien es el próximo que tiene coraje de quitármelo, o al menos, de intentarlo.
Hoy me doy cuenta de que el problema era yo: por no querer ver. Por no dejar ir algo que yo creía que me pertenecía cuando en realidad nunca había sido mio. Aunque había estado cerca. Una falsa sensación de tener el mundo a tu alcance, esperando a que tú decidas cogerlo. Pero falsa al fin y al cabo.
Hoy me doy cuenta de que estoy exactamente donde tengo que estar, aunque haya perdido muchas cosas en el camino. Aunque una de esas cosas fuese yo misma, una parte de mi que no voy a recuperar, de momento...
Y sobre todo hoy me doy cuenta de que no merece la pena estar luchando en una guerra que no es la mía.
Ahora deambulo sin rumbo, abriéndome paso entre las balas. Con mi traje de "no me importa" recién estrenado. Peleando si hace falta a base de mordiscos en medio de la oscuridad de tantas noches de insomnio. A ver quien es el próximo que tiene coraje de quitármelo, o al menos, de intentarlo.
domingo, 13 de octubre de 2013
Pero a veces...
Crees que no entiendo tus miedos, pero yo también los tuve. Piensas que no sé como te sientes solo porque mi elección es distinta a la tuya. Porque yo acepto lo que siento, y no gasto mis fuerzas evitando obtener lo que quiero. Huyendo.
Con el tiempo te das cuenta de lo importante que es aprovechar cada minuto que puedas en ser feliz. Coleccionar aquellas cosas, pequeñas o grandes, que te saquen una sonrisa cuando más lo necesitas, porque son esas cosas las que te hacen más fácil el día a día, el levantarte contento un lunes o el irte a la cama sin pesadillas.
Pero a veces la gente se empeña en no ser feliz. Desperdiciando sus mejores años. Unos simplemente no saben como encontrar sus pensamientos alegres y guardar esos tesoros, y otros no entienden el verdadero valor de ciertos momentos hasta que ya no pueden recuperarlos.
En ocasiones hay que tener el coraje de perseguir lo que se desea. Es muy fácil y cómodo sentarse a esperar que la vida nos sorprenda y nos llene de regalos de un día para otro, pero sin el esfuerzo no se consigue ni se mantiene nada. A veces no basta sólo con querer las cosas, hay que luchar por ellas.
Todo es cuestión de perspectiva, y a veces es necesario cambiarla para deshacerse de esos monstruos que te atormentan por las noches y no te dejan pegar ojo.
Y quiero decirte que te entiendo, que es normal. Que te lo tomes con calma y trates de disfrutar sin que el miedo te gane tantas batallas.
Que yo solo quiero que tus monstruos entiendan a los míos. Pero a veces, con querer, no basta...
jueves, 26 de septiembre de 2013
Sorda y loca.
Trato de borrarte, como si no fueras más que un mal recuerdo escrito a lápiz. Las lágrimas mojan el papel... o tal vez sea que llueve en mi cabeza, en un intento de borrar las huellas que dejaste. Lluvia que cae hora tras hora sin parar; hasta que se me ahogan las caricias, se me empapan los abrazos y se me hunden los besos. Pero el miedo flota, y los celos no se hunden por mucho que intente ahogarlos.
Es esa flor de papel la que me grita hoy desde mi agenda aquellas cosas bonitas que me decías al oído, mientras yo la miro fingiendo no escucharla, fingiendo estar sorda.
Así que aquí estoy, sorda y loca, con la memoria cada vez más vacía y el corazón cada vez más seco.Convirtiéndome en aquello que nunca quise ser, pensando que nadie podrá devolverme lo me quitaste...
Tan loca que ya ni me pregunto dónde están mis ganas de ti, porque también te las llevaste.
domingo, 15 de septiembre de 2013
Quizás mañana.
Me voy a la cama pensando qué ha sido de nosotros y en qué momento decidimos ser dos desconocidos otra vez. No dejo de pensar que hoy ni te acuerdas de mi nombre. Y sin embargo yo no puedo evitar recordarlo todo, cada segundo y cada beso. Cada susurro al oído.
El enfado, la rabia y el sentimiento de impotencia con cada vez mayores, sabiendo que no hay nada que yo pueda hacer por cambiar la situación. Me enfado contigo, y conmigo...
Se me clavan tus indiferencias como puñales y me quema cada palabra que no dices.
Me encantaría decir que pierdo las ganas de ti, pero estaría mintiendo.
Quizás mañana...
El enfado, la rabia y el sentimiento de impotencia con cada vez mayores, sabiendo que no hay nada que yo pueda hacer por cambiar la situación. Me enfado contigo, y conmigo...
Se me clavan tus indiferencias como puñales y me quema cada palabra que no dices.
Me encantaría decir que pierdo las ganas de ti, pero estaría mintiendo.
Quizás mañana...
domingo, 8 de septiembre de 2013
I am no longer HER.
Now you are just another one. Another name on my list.
You used to be THE one. You were. Even you didn´t know.
You are a blurry memory. I can´t feel your smell in my clothes anymore. I miss the way you used to look at me. I don´t wanna see you ever again, but I do at the same time. It´s quite confusing when the only thing I can think about is that something is missing fom me, like you took it away. And I need it back.
It´s hard to think about what we are now and what we used to be. And it hurts.
Cause you are not there anymore.
We are extrangers again.
Cause now I´m just another one.
Cause I´m no longer "HER".
You used to be THE one. You were. Even you didn´t know.
You are a blurry memory. I can´t feel your smell in my clothes anymore. I miss the way you used to look at me. I don´t wanna see you ever again, but I do at the same time. It´s quite confusing when the only thing I can think about is that something is missing fom me, like you took it away. And I need it back.
It´s hard to think about what we are now and what we used to be. And it hurts.
Cause you are not there anymore.
We are extrangers again.
Cause now I´m just another one.
Cause I´m no longer "HER".
jueves, 5 de septiembre de 2013
Aunque sea inevitable.
Es inevitable mirar al pasado de vez en cuando y preguntarte cómo habrían sido las cosas si tan solo cambiasen ciertos detalles.
Es inevitable no comparar. No extrañar ciertos momentos en los que todo parecía ir mejor. Épocas con menos preocupaciones, con la vida más fácil...
A veces dedicamos tanto tiempo a mirar hacia atrás que nos olvidamos de todo aquello que hemos conseguido.
Pasamos tanto tiempo echando de menos momentos que ya pasaron que se nos olvida todo el esfuerzo que hicimos para poder llegar hasta donde hoy nos encontramos. De repente nos olvidamos de los logros, y es todo nostalgia.
No te dejes llevar por ese sentimiento, o volverás a caer en menos de lo que crees, y entonces esos logros no servirán de nada. Sería como dar un gran paso hacia detrás. No dejes que te inunde, no dejes que te arrastre.
Y si es verdad que nada ocurre por causalidad y todo ocurre por una razón, aunque ahora no lo creas porque todo resulta difícil y complicado, significa que vas por el camino correcto y estás exactamente donde debes estar. Aunque sea inevitable...
Es inevitable no comparar. No extrañar ciertos momentos en los que todo parecía ir mejor. Épocas con menos preocupaciones, con la vida más fácil...
A veces dedicamos tanto tiempo a mirar hacia atrás que nos olvidamos de todo aquello que hemos conseguido.
Pasamos tanto tiempo echando de menos momentos que ya pasaron que se nos olvida todo el esfuerzo que hicimos para poder llegar hasta donde hoy nos encontramos. De repente nos olvidamos de los logros, y es todo nostalgia.
No te dejes llevar por ese sentimiento, o volverás a caer en menos de lo que crees, y entonces esos logros no servirán de nada. Sería como dar un gran paso hacia detrás. No dejes que te inunde, no dejes que te arrastre.
Y si es verdad que nada ocurre por causalidad y todo ocurre por una razón, aunque ahora no lo creas porque todo resulta difícil y complicado, significa que vas por el camino correcto y estás exactamente donde debes estar. Aunque sea inevitable...
martes, 3 de septiembre de 2013
I can´t find the words.
Lately, I just can´t stop thinking this is not the end I wanted. This is not how things should had ended.
Why did all this turn out so bad? And why do I feel like there are so many things left unsaid? So many things inside my chest that I don´t understand...
So many things I would like to say to you. So much time waiting to close things up, wondering if I was the problem. So much time with no answer but silence and cold indifference.
But it did end. It´s all over and there is no way back. Nothing will be like it was before, I won´t ever feel the same way.
Now we are extrangers again, sharing nothing else but some uncomfortable and bittersweet greetings once in a while.
And I need to say goodbye... But I can´t find the words.
Why did all this turn out so bad? And why do I feel like there are so many things left unsaid? So many things inside my chest that I don´t understand...
So many things I would like to say to you. So much time waiting to close things up, wondering if I was the problem. So much time with no answer but silence and cold indifference.
But it did end. It´s all over and there is no way back. Nothing will be like it was before, I won´t ever feel the same way.
Now we are extrangers again, sharing nothing else but some uncomfortable and bittersweet greetings once in a while.
And I need to say goodbye... But I can´t find the words.
domingo, 25 de agosto de 2013
Los valientes.
Contra viento y marea luchamos los valientes, llueva o nieve en el camino.
Contra nuestros demonios y contra nosotros mismos.
Contra enemigos.
Contra el mismo miedo.
Contra todo lo que caiga del cielo.
Seguimos andando y abriéndonos camino a través de la batalla, con las cicatrices aún sangrando y los pies levantando polvo, arrastrándonos poco a poco sin un destino claro y con la vista fija en un horizonte que cada vez queda más lejos.
Pero seguimos, porque somos los valientes.
Contra nuestros demonios y contra nosotros mismos.
Contra enemigos.
Contra el mismo miedo.
Contra todo lo que caiga del cielo.
Seguimos andando y abriéndonos camino a través de la batalla, con las cicatrices aún sangrando y los pies levantando polvo, arrastrándonos poco a poco sin un destino claro y con la vista fija en un horizonte que cada vez queda más lejos.
Pero seguimos, porque somos los valientes.
Lo siento.
Lo siento si soy cariñosa contigo. Lo siento si me preocupo por ti. Lo siento si me intereso en tu vida. Lo siento si intento sacarte una sonrisa. Lo siento si me importas. Lo siento si me encantas. Lo siento si pienso en ti cada minuto, si eres lo primero cuando me despierto y lo último cuando me duermo. Lo siento si me enamoro.
Y sobretodo lo siento si no te gusta.
PERO DE LOS DOS TÚ PIERDES MÁS QUE YO.
Y sobretodo lo siento si no te gusta.
PERO DE LOS DOS TÚ PIERDES MÁS QUE YO.
viernes, 16 de agosto de 2013
Aunque cada vez sea más difícil...
¿Porqué me siento como si siempre fuese la persona correcta en el momento equivocado? ¿Será que siempre llego tarde?
Ojalá no me importase. No estar preocupada por nada en absoluto y que todo me diese igual.
No sentir nada. No esperar nada de nadie, no dejar que nadie me decepcione.
Pasar de todo y de todos sin pasarlo mal.
No tener ningún tipo de remordimientos al portarme como una hija de puta con los demás, se lo merezcan o no.
Que no me lleven los demonios ni me coman los celos.
No ser yo la que acaba llorando.
No amargarme por nada ni nadie...
Y sin embargo seguiría pensando que es la persona correcta en un momento equivocado. Aunque se esté perdiendo lo mejor por miedo a disfrutarlo. Aunque cada vez sea más difícil.
Difícil porque de vez en cuando lo único que necesitas es que alguien te diga:
-Quédate conmigo.
Ojalá no me importase. No estar preocupada por nada en absoluto y que todo me diese igual.
No sentir nada. No esperar nada de nadie, no dejar que nadie me decepcione.
Pasar de todo y de todos sin pasarlo mal.
No tener ningún tipo de remordimientos al portarme como una hija de puta con los demás, se lo merezcan o no.
Que no me lleven los demonios ni me coman los celos.
No ser yo la que acaba llorando.
No amargarme por nada ni nadie...
Y sin embargo seguiría pensando que es la persona correcta en un momento equivocado. Aunque se esté perdiendo lo mejor por miedo a disfrutarlo. Aunque cada vez sea más difícil.
Difícil porque de vez en cuando lo único que necesitas es que alguien te diga:
-Quédate conmigo.
viernes, 2 de agosto de 2013
Que yo no soy para un rato.
Me quedé con las ganas de decirte muchas cosas...
Que duele ser tu amiga. Que duele ser algo y no serlo a la vez. Que duele estar ahí, pero duele más no estarlo.
Que me enveneno con mis propios pensamientos, que me llevan los demonios.
Que me siento MUY estúpida. Más aún que ninguna otra vez anterior. Que me parece injusto no haberlo sabido antes, ignorante y confiada como siempre.
Y lo peor de todo es que ni siquiera se de quien es la culpa.
Que aprendí cosas buenas, pero también cosas malas.
Que no volverá a pasar. Que esta es la última vez.
Y sobretodo tenía que decirte, a ti y a todos, que yo no soy para un rato y que merezco más que eso.
sábado, 20 de julio de 2013
Pero hoy no es ese día.
Veo en tus ojos el mismo miedo que encogería mi propio corazón.
Pudiera llegar el día en que tu valor decayera, en que olvidaras todo lo que has vivido y todo lo que has aprendido. Pero hoy no es ese día. En que un conjunto de tiritas y corazones rotos fuesen testimonio de los errores cometidos. Pero hoy no es ese día. En este día lucharás. Por todo aquello que tu corazón ama o anhela. Yo te llamo a luchar.
"No te preocupes, todo irá bien..."
Algo pasa, eso lo sé. No se muy bien el qué, pero está claro que algo pasa.
Algo que no te deja dormir por las noches. Te absorbe los ánimos y las ganas de comer, las ganas de salir y estar con gente. Rodearte no sirve de nada para quitarte el mal sabor de boca...
Algo no está bien. Algo va a pasar pronto: algo malo.
Es como un sexto sentido, que te avisa cuando algo desagradable se acerca.
No te va a gustar, eso también lo sabes.
Y con ese gusto amargo bajo la lengua solo buscas liberar tu mente antes de irte a dormir. Una almohada que escuche y te diga: "No te preocupes que todo irá bien". Que te de seguridad y tranquilidad.
Pero esta noche no.
sábado, 6 de julio de 2013
Lo importante es dejar huella.
A menudo la gente no sabe el efecto que puede provocar en ti.
Hay gente que te destroza a su paso por tu vida, que te hace sentirte pequeño e insignificante, sin importarles lo que dejan tras de si, convirtiéndote en algo que no eres, o alguien que no quieres ser. Te cambian el carácter y acabas por no fiarte de nadie. Te pierdes por el camino y ya no tienes manera de volver.
Luego están esas personas, que te abren los ojos y te hacen darte cuenta de todas aquellas cosas que estabas haciendo mal hasta el momento.Te hacen darte cuenta de lo que realmente quieres o buscas y de que no es justo conformarse con algo con lo que no estás a gusto. Gente que con dos tonterías te saca una sonrisa y con otras dos más te hace sentirte especial. Gente con la que aprendes que lo importante es dejar huella.
Dicen que a menudo aceptamos aquellas cosas que creemos merecernos.
Y una vez cada mucho tiempo te cruzas con alguien que te enseña que no tienes que conformarte con cualquier cosa, porque mereces mucho más que eso, aunque no siempre lo recuerdes. Y lo agradeces, porque después de tanto tiempo, te mereces algo así. Algo que merezca la pena.
A menudo la gente no sabe el efecto que puede provocar en ti.
Pero recuerda, lo importante es dejar huella.
Hay gente que te destroza a su paso por tu vida, que te hace sentirte pequeño e insignificante, sin importarles lo que dejan tras de si, convirtiéndote en algo que no eres, o alguien que no quieres ser. Te cambian el carácter y acabas por no fiarte de nadie. Te pierdes por el camino y ya no tienes manera de volver.
Luego están esas personas, que te abren los ojos y te hacen darte cuenta de todas aquellas cosas que estabas haciendo mal hasta el momento.Te hacen darte cuenta de lo que realmente quieres o buscas y de que no es justo conformarse con algo con lo que no estás a gusto. Gente que con dos tonterías te saca una sonrisa y con otras dos más te hace sentirte especial. Gente con la que aprendes que lo importante es dejar huella.
Dicen que a menudo aceptamos aquellas cosas que creemos merecernos.
Y una vez cada mucho tiempo te cruzas con alguien que te enseña que no tienes que conformarte con cualquier cosa, porque mereces mucho más que eso, aunque no siempre lo recuerdes. Y lo agradeces, porque después de tanto tiempo, te mereces algo así. Algo que merezca la pena.
A menudo la gente no sabe el efecto que puede provocar en ti.
Pero recuerda, lo importante es dejar huella.
sábado, 15 de junio de 2013
SHHHHHHH
La armadura lista, el escudo bien alto y la espada firme.
Que nadie se de cuenta de que estás temblando, con el corazón a mil y la respiración acelerada. Las manos inquietas y la mirada perdida.
Que nadie lo sepa. Que nadie sepa que te llevan los demonios, que te comen los celos por dentro con un simple pensamiento.
Que nadie lo use en tu contra.
Que nadie te vea débil, que nadie te vea triste. Que no sepan que te duele la sonrisa de forzarla.
Que nadie sepa lo que duele.
Que nadie descubra tu punto débil, que te importa, que no olvidas. Que no sepan que lo sabes, que crean que es casualidad.
Que no vean que quieres más. Que no vean la puerta abierta.
Que no vean lo que hay debajo de la coraza. Que no sepan quién hay debajo.
Shhhhhh.
Que nadie lo sepa.
Que nadie se de cuenta.
Que nadie se de cuenta de que estás temblando, con el corazón a mil y la respiración acelerada. Las manos inquietas y la mirada perdida.
Que nadie lo sepa. Que nadie sepa que te llevan los demonios, que te comen los celos por dentro con un simple pensamiento.
Que nadie lo use en tu contra.
Que nadie sepa lo que duele.
Que nadie descubra tu punto débil, que te importa, que no olvidas. Que no sepan que lo sabes, que crean que es casualidad.
Que no vean que quieres más. Que no vean la puerta abierta.
Que no vean lo que hay debajo de la coraza. Que no sepan quién hay debajo.
Que nadie lo sepa.
Que nadie se de cuenta.
miércoles, 12 de junio de 2013
Y así estoy: con la lengua fuera y la cara de tonta.
Te ponen la miel en los labios y luego te la quitan, de un guantazo.
Es como cuando estás masticando chicle y estás intentando hacer una pompa pero sin darte cuenta abres la boca demasiado y se te cae el chicle, y miras rápidamente alrededor para ver si alguien se ha dado cuenta, y en seguida intentas disimular.
Es como cuando Gollum por fin le quita el anillo a Frodo, saltando de alegría porque lleva años buscándolo, y por fin lo ha encontrado. Y cuando más eufórico está es lanzado a las llamas de El Monte del Destino.
Es como cuando Ned pide perdón por haber traicionado a Joffrey "el heredero del rey" públicamente, pensando que así salvará su vida, y aún así Joffrey le corta la cabeza. Y para colmo la clava en una pica y se la enseña a Sansa.
Es como cuando Harry encuentra por primera vez el espejo de Oesed, y se ve reflejado junto a sus padres. Casi puede tocarles. Pero al mirar a su alrededor se da cuenta de que no están allí, de que aquello que está viendo no es real y únicamente puede verlos en el espejo.
Es como cuando le pides un poco de helado a alguien y cuando ya tienes la lengua fuera para probarlo alejan el helado, dejándote con la lengua fuera y la cara de tonto.
sábado, 8 de junio de 2013
Todos hemos tenido un día así...
Hoy es uno de esos días en los que todo te sale mal.
Te puede la presión y acabas explotando como el plástico de burbujas bajo la yema de los dedos. Llevas toda la tarde con el pulso a 1000, taquicárdica perdida, que parece que tienes parkinson. Así no hay quien estudie. Agobio.
Hundes la cabeza en un bol de helado, o en un paquete de galletas... le das al chocolate y a los cacahuetes. Coges un vaso de coca-cola deseando que fuese whisky y al menos te hiciera dormir como un tronco.
Te pones a hablar con los 4 gatos de siempre, al menos te olvidas un rato del resto del mundo. Te sacan cuatro sonrisas y al final acabas viendo vídeos chorras en Youtube; que si un bebe que se ríe, alguien bailando que da vergüenza ajena y reacciones al último capítulo de JDT mientras piensas "qué cabrón..."
Hasta que vuelves a la realidad. Vaya mierda de día. Si al menos pudiese salir de fiesta y no tuviese que estar aquí estudiando... PERO NO.
Te haces un ovillo en la cama y te torturas... cosa que te encanta. Eres masoca... Hasta que decides que es mejor que te vayas a dormir por que no vas a sacar nada bueno hoy. Ni seguramente mañana tampoco, pero ya te agobiarás otra vez si hace falta...
Y piensas: " Va, la última canción y me voy a la cama... Mierda si me queda media coca-cola."
Te puede la presión y acabas explotando como el plástico de burbujas bajo la yema de los dedos. Llevas toda la tarde con el pulso a 1000, taquicárdica perdida, que parece que tienes parkinson. Así no hay quien estudie. Agobio.
Hundes la cabeza en un bol de helado, o en un paquete de galletas... le das al chocolate y a los cacahuetes. Coges un vaso de coca-cola deseando que fuese whisky y al menos te hiciera dormir como un tronco.
Te pones a hablar con los 4 gatos de siempre, al menos te olvidas un rato del resto del mundo. Te sacan cuatro sonrisas y al final acabas viendo vídeos chorras en Youtube; que si un bebe que se ríe, alguien bailando que da vergüenza ajena y reacciones al último capítulo de JDT mientras piensas "qué cabrón..."
Hasta que vuelves a la realidad. Vaya mierda de día. Si al menos pudiese salir de fiesta y no tuviese que estar aquí estudiando... PERO NO.
Te haces un ovillo en la cama y te torturas... cosa que te encanta. Eres masoca... Hasta que decides que es mejor que te vayas a dormir por que no vas a sacar nada bueno hoy. Ni seguramente mañana tampoco, pero ya te agobiarás otra vez si hace falta...
Y piensas: " Va, la última canción y me voy a la cama... Mierda si me queda media coca-cola."
sábado, 1 de junio de 2013
Te quites o no la armadura...
Una persona no te conoce por lo que lee de ti.
La gente no llega a conocerte por estar 2 minutos contigo, o por acercarse a ti.
Nadie puede conocerte por lo que otros le han contado de ti, aunque así lo crean.
Ni llegará a conocerte por observarte desde lejos.
Algunos lo creerán por aquello que les digas en confidencia.
Muchos otros lo creerán por la imagen que das. Bastante lejos de la que pretendes. Muy diferente a la verdadera.
Todos se harán una imagen de ti. Buena o mala. O simplemente distorsionada.
Lleves o no una máscara, tengas 2 o 20 caras, te quites o no la armadura...
NINGUNO TE CONOCE. Y todos creerán hacerlo.
La gente no llega a conocerte por estar 2 minutos contigo, o por acercarse a ti.
Nadie puede conocerte por lo que otros le han contado de ti, aunque así lo crean.
Ni llegará a conocerte por observarte desde lejos.
Algunos lo creerán por aquello que les digas en confidencia.
Muchos otros lo creerán por la imagen que das. Bastante lejos de la que pretendes. Muy diferente a la verdadera.
Todos se harán una imagen de ti. Buena o mala. O simplemente distorsionada.
Lleves o no una máscara, tengas 2 o 20 caras, te quites o no la armadura...
NINGUNO TE CONOCE. Y todos creerán hacerlo.
viernes, 24 de mayo de 2013
No soy yo, eres tú.
Acabo de darme cuenta de lo que la gente ve en mí cuando me conoce por primera vez. Y es así por que me he visto reflejada en otra persona. Tantas cosas en común... estaba claro que no iba a salir bien.
Acabo de darme cuenta de que si me conociese a mi misma ni yo misma me soportaría.
¿Cómo puedo si quiera culpar a alguien por no querer estar cerca, si ni siquiera yo misma lo haría?
Si no me soporto ni yo, ¿como me va a soportar el resto?
Quizás con un cambio de actitud. Un cambio de todo... Un cambio de los de verdad, y no de esos que duran lo que tarda en llegar el primer chulito de turno que te saca dos sonrisas y te acaricia la oreja.
Un muro sería un buen cambio... ¿pero a qué precio?
El problema no es solo mi cambio de actitud, sino que la actitud del resto ya no me sorprende. Ya no me aporta absolutamente nada.
Nadie que no pretenda quedarse merece la pena el tiempo suficiente para conocerle. Y quien no espera por ti lo suficiente como para conocerte no merece la pena que se quede. Es así de sencillo.
"No soy yo, eres tú."
No...
No creas que por verme llorar sabes qué me afecta. No creas que por escucharme entiendes mis problemas. No creas que por llevar en mi vida dos días me conoces mejor que cualquiera.
No lo has intentado más que nadie.
Siento decirte que no eres mejor que ninguno de los anteriores.
Te sobra diversión.
Te faltan buenas intenciones.
No tener motivos para quedarte es un buen motivo para irte.
miércoles, 22 de mayo de 2013
No es suficiente.
¿En qué momento lo echaste todo a perder?
¿En qué momento dejaste que todo se pudriera?
¿En qué momento dejaste de mirar hacia delante y comenzaste a deambular, adentrándote en un camino que no querías recorrer?
¿En qué momento pensaste que sería mejor adaptarse a los deseos del resto?
¿En qué momento te perdiste a ti misma?
¿En qué momento te diste cuenta de que no había vuelta atrás?
A esto es a lo que has llegado.
Y esto no es suficiente.
Quizás cuando todo termine el "ahora" sea diferente.
¿En qué momento dejaste que todo se pudriera?
¿En qué momento dejaste de mirar hacia delante y comenzaste a deambular, adentrándote en un camino que no querías recorrer?
¿En qué momento pensaste que sería mejor adaptarse a los deseos del resto?
¿En qué momento te perdiste a ti misma?
¿En qué momento te diste cuenta de que no había vuelta atrás?
A esto es a lo que has llegado.
Y esto no es suficiente.
Quizás cuando todo termine el "ahora" sea diferente.
Nada cambia.
Pase lo que pase nada cambia.
Una noche te metes en la cama a reflexionar y piensas en todo el tiempo que ha pasado desde esa última vez que hiciste recuento de lo bueno y de lo malo.
De vez en cuando la balanza se inclina, cambiando por completo tu estado de ánimo hacia uno u otro extremo. Tanto que a veces parece imposible encontrar un termino medio.
Estamos tan acostumbrados a llevar los problemas a la espalda que ya ni sabemos deshacernos de ellos. Cada vez más encorvados, llevamos tantos que uno más ya no hace diferencia alguna.
Y después de varios meses te das cuenta de que nada ha cambiado en absoluto. Ni tú tampoco.
Unos entran en tu vida y otros salen de ella, y los que siguen estando ahí se hacen notar de vez en cuando...Demasiado como para echarlos de menos, demasiado poco como para echarlos.
La gente sale de tu vida con la rapidez de un parpadeo. En ocasiones dejan huella, en otras no dejan nada.
Pase lo que pase nada cambia. Al final todo sigue exactamente igual que antes. Los mismos problemas a la espalda, la mismas ataduras, las mismas expectativas, las mismas aspiraciones, los mismos sueños, los mismos deseos...
NADA CAMBIA.
Una noche te metes en la cama a reflexionar y piensas en todo el tiempo que ha pasado desde esa última vez que hiciste recuento de lo bueno y de lo malo.
De vez en cuando la balanza se inclina, cambiando por completo tu estado de ánimo hacia uno u otro extremo. Tanto que a veces parece imposible encontrar un termino medio.
Estamos tan acostumbrados a llevar los problemas a la espalda que ya ni sabemos deshacernos de ellos. Cada vez más encorvados, llevamos tantos que uno más ya no hace diferencia alguna.
Y después de varios meses te das cuenta de que nada ha cambiado en absoluto. Ni tú tampoco.
Unos entran en tu vida y otros salen de ella, y los que siguen estando ahí se hacen notar de vez en cuando...Demasiado como para echarlos de menos, demasiado poco como para echarlos.
La gente sale de tu vida con la rapidez de un parpadeo. En ocasiones dejan huella, en otras no dejan nada.
Pase lo que pase nada cambia. Al final todo sigue exactamente igual que antes. Los mismos problemas a la espalda, la mismas ataduras, las mismas expectativas, las mismas aspiraciones, los mismos sueños, los mismos deseos...
NADA CAMBIA.
martes, 21 de mayo de 2013
Casi puedo verlo.
Camino sin mirar hacia dónde voy.
No hay sendero, mas aquel que dejo tras de mí.
Camino a ciegas, a tientas, pisando fuerte para no caerme.
Hasta que llega un momento en el que no puedo seguir.
Ni tampoco sé volver.
Algo me bloquea, pero no hay nada ni nadie a mi alrededor; nada que me indique dónde estoy, nadie que me de una pista o me tienda la mano.
Algo me bloquea... Es el miedo.
Yo nunca tuve miedo.
Nunca me paré a mitad del camino; ni siquiera para orientarme, o recapacitar.
Nunca me paré a mitad del camino para no pensar.
Y ahora no puedo moverme.
Nunca pedí ayuda. Nunca la quise.
Tras un tropiezo siempre volví a ponerme en marcha, aunque de vez en cuando echase la vista atrás. Siempre con la conciencia inocente e ingenua... sobretodo ingenua.
Entre tanto silencio, entre tanta oscuridad, entre tanta "NADA"... y sin poder moverme.
Me he perdido.
No hay brújula.
No hay mapa.
No hay timón.
Pero puedo sentir el miedo. Puedo oler que está en el aire. Casi puedo verlo. Es un miedo nuevo, diferente, intrigante, que me invita a seguirlo, a disfrutarlo... Pero no puedo moverme.
No hay sendero, mas aquel que dejo tras de mí.
Camino a ciegas, a tientas, pisando fuerte para no caerme.
Hasta que llega un momento en el que no puedo seguir.
Ni tampoco sé volver.
Algo me bloquea, pero no hay nada ni nadie a mi alrededor; nada que me indique dónde estoy, nadie que me de una pista o me tienda la mano.
Algo me bloquea... Es el miedo.
Yo nunca tuve miedo.
Nunca me paré a mitad del camino; ni siquiera para orientarme, o recapacitar.
Nunca me paré a mitad del camino para no pensar.
Y ahora no puedo moverme.
Nunca pedí ayuda. Nunca la quise.
Tras un tropiezo siempre volví a ponerme en marcha, aunque de vez en cuando echase la vista atrás. Siempre con la conciencia inocente e ingenua... sobretodo ingenua.
Entre tanto silencio, entre tanta oscuridad, entre tanta "NADA"... y sin poder moverme.
Me he perdido.
No hay brújula.
No hay mapa.
No hay timón.
Pero puedo sentir el miedo. Puedo oler que está en el aire. Casi puedo verlo. Es un miedo nuevo, diferente, intrigante, que me invita a seguirlo, a disfrutarlo... Pero no puedo moverme.
domingo, 19 de mayo de 2013
Un poquito menos.
Cada día dueles un poquito menos.
Sobretodo en días como hoy.
Sobretodo en días como hoy.
jueves, 2 de mayo de 2013
¿Para qué?
¿Para qué querría yo a alguien como tú?
¿Para qué?
¿Para qué querría a alguien que no sabe valorarme, alguien a quien no le importa lo mucho o poco que me preocupo, las veces que pienso en él, las veces que lo echo de menos?
¿Para qué querría a alguien que no tiene las cosas claras, alguien que cambia de opinión cada 15 segundos, alguien que no lucha por lo que quiere, que ni siquiera lo intenta?
¿Para qué querría yo a alguien que no deja conocerse, que evita sentirse vulnerable, alguien que no aprovecha las oportunidades?
¿Para qué querría yo a un joven que no vive la vida?
¿Para qué podría querer alguien como yo a alguien como tú?
¿Para qué...?
¿Para qué?
¿Para qué querría a alguien que no sabe valorarme, alguien a quien no le importa lo mucho o poco que me preocupo, las veces que pienso en él, las veces que lo echo de menos?
¿Para qué querría a alguien que no tiene las cosas claras, alguien que cambia de opinión cada 15 segundos, alguien que no lucha por lo que quiere, que ni siquiera lo intenta?
¿Para qué querría yo a alguien que no deja conocerse, que evita sentirse vulnerable, alguien que no aprovecha las oportunidades?
¿Para qué querría yo a un joven que no vive la vida?
¿Para qué podría querer alguien como yo a alguien como tú?
¿Para qué...?
Y tú ¿quién eres?
Soy esa piedra con la que tropiezas por el camino.
Soy ese pensamiento que viene y va cada día.
Soy ese silencio cuando estás solo.
Soy ese vacío en el pecho.
Soy esa piel que acaricias con las yemas de los dedos.
Soy el perfume en tu almohada.
Soy tu "y si..."
Soy ese escalofrío a media noche.
Soy la razón por la que tiemblas.
Soy esa mirada que te descontrola.
Soy los besos en tus sábanas.
Soy tu insomnio.
Pero aún no lo sabes.
Soy ese pensamiento que viene y va cada día.
Soy ese silencio cuando estás solo.
Soy ese vacío en el pecho.
Soy esa piel que acaricias con las yemas de los dedos.
Soy el perfume en tu almohada.
Soy tu "y si..."
Soy ese escalofrío a media noche.
Soy la razón por la que tiemblas.
Soy esa mirada que te descontrola.
Soy los besos en tus sábanas.
Soy tu insomnio.
Pero aún no lo sabes.
viernes, 19 de abril de 2013
miércoles, 17 de abril de 2013
"¡¡Despierta idiota!!"
Y en realidad...
¿Qué era lo que esperaba?
¿Qué era lo que quería?
Está claro que no ha salido como yo pensaba o imaginaba, como a mí me hubiera gustado.
Un gesto dulce, una mirada excitada, una sonrisa nerviosa, un comentario incitante...
No.
Ha sido una jarra de agua fría y un grito al oído:
¡¡Despierta idiota!!
Despierta que él ya no piensa en ti.
Ya no se pone nervioso al verte.
Ya no siente.
Ya no miente.
Ya no se arrepiente.
¿Qué era lo que esperaba?
¿Qué era lo que quería?
Está claro que no ha salido como yo pensaba o imaginaba, como a mí me hubiera gustado.
Un gesto dulce, una mirada excitada, una sonrisa nerviosa, un comentario incitante...
No.
Ha sido una jarra de agua fría y un grito al oído:
¡¡Despierta idiota!!
Despierta que él ya no piensa en ti.
Ya no se pone nervioso al verte.
Ya no siente.
Ya no miente.
Ya no se arrepiente.
lunes, 8 de abril de 2013
It´s like screaming...
Esperaré volver a verte, tarde o temprano.
Esperaré cruzarme contigo, de casualidad, aunque lleve esperándolo meses.
Esperaré que me sonrías.
Esperaré que te acuerdes de mí. Que te acuerdes de todo.
Esperaré que nos volvamos a tocar.
Esperaré que vuelvas a ponerte nervioso, que vuelvas a ponerme nerviosa.
Y esperaré... y esperaré... y esperaré...
Esperaré a que ocurra algún día, y tal vez estés preparado, O TAL VEZ NO.
And when it´s over, and it´s gone, you almost wish that you could have all that bad stuff back, so that you could have the good.
Esperaré cruzarme contigo, de casualidad, aunque lleve esperándolo meses.
Esperaré que me sonrías.
Esperaré que te acuerdes de mí. Que te acuerdes de todo.
Esperaré que nos volvamos a tocar.
Esperaré que vuelvas a ponerte nervioso, que vuelvas a ponerme nerviosa.
Y esperaré... y esperaré... y esperaré...
Esperaré a que ocurra algún día, y tal vez estés preparado, O TAL VEZ NO.
And when it´s over, and it´s gone, you almost wish that you could have all that bad stuff back, so that you could have the good.
martes, 2 de abril de 2013
Yo sólo quiero andar descalza...
Existe un momento exacto en el que esa persona te pregunta:
-¿Y tú qué quieres? ¿Qué esperas?
Quiero besos de buenas noches, y de buenos días.
Y automáticamente dejas tu mente divagar, alimentando la imaginación...
Quiero besos de buenas noches, y de buenos días.
Quiero las horas muertas en la cama mirándote mientras duermes.
Quiero levantarme por la mañana y que me obligues a quedarme un ratito más entre besos y caricias.
Quiero levantarme por la mañana y que me obligues a quedarme un ratito más entre besos y caricias.
Quiero que me hagas reír, y no llorar.
Quiero detalles.
Quiero andar descalza y que me sorprendas por detrás, abrazándome y susurrándome al oído que te encanto.
Quiero andar descalza y que me sorprendas por detrás, abrazándome y susurrándome al oído que te encanto.
Quiero esa mirada cómplice seguida de una sonrisa.
Quiero ser la única.
Quiero ser la única.
-¿Yo? Yo sólo quiero andar descalza...
viernes, 29 de marzo de 2013
But of course you don´t know...
I´ve been thinking about it for days. I did nothing wrong.
Should I have guessed it? Should I have been ready for it?
Seems like it has become a repetitive story, always the same. And it´s my fault, cause I let it happen. Like I always do.
The same mistake with a different face. With a different name. The same lies...
But you don´t know how it feels.
You don´t know how hard it is start from scratch all over again.
You don´t know how many times I´ve been thinking about it, feeling bad.
You don´t know all the times I´ve wondered myself if there was something I could change, if there was something I could have done different, wondering if i´m the problem.
You don´t know how this could affect me or change me.
You don´t know if I cried in the inside.
You don´t know if I regret what happened.
You don´t know how much I hate this.
You don´t know me, cause you never tried to, cause you never wanted to.
You don´t know you are not the first mistake I make.
You don´t know I don´t want to see you ever again.
You don´t know how I feel when I go to bed, in the middle of the night, trying to sleep.
You don´t know, cause you dont want to, cause you dont care.
I feel guilty. But of course you don´t know...
Should I have guessed it? Should I have been ready for it?
Seems like it has become a repetitive story, always the same. And it´s my fault, cause I let it happen. Like I always do.
The same mistake with a different face. With a different name. The same lies...
But you don´t know how it feels.
You don´t know how hard it is start from scratch all over again.
You don´t know how many times I´ve been thinking about it, feeling bad.
You don´t know all the times I´ve wondered myself if there was something I could change, if there was something I could have done different, wondering if i´m the problem.
You don´t know how this could affect me or change me.
You don´t know if I cried in the inside.
You don´t know if I regret what happened.
You don´t know how much I hate this.
You don´t know me, cause you never tried to, cause you never wanted to.
You don´t know you are not the first mistake I make.
You don´t know I don´t want to see you ever again.
You don´t know how I feel when I go to bed, in the middle of the night, trying to sleep.
You don´t know, cause you dont want to, cause you dont care.
I feel guilty. But of course you don´t know...
martes, 26 de marzo de 2013
Mi superpoder.
Imagina por un momento que tienes un superpoder.
Imagina ser invisible, retroceder en el tiempo o leer la mente. Podrías evitar miradas molestas, enmendar aquellos errores que más te pesan y saber en todo momento quién te miente y quién no.
Os imagináis a vosotros mismos salvando el momento, el mundo. Aquellas cosas imposibles y grandiosas en las que podríais emplear esos dones. La capacidad de salvar a alguien de una situación desafortunada. La satisfacción de ser los héroes. La sensación de responsabilidad por algo que merece la pena...
Hoy he descubierto que tengo un superpoder.
Algo que me define, que es únicamente mío. Algo que forma parte de mí y que se me da bien sin la necesidad de esforzarme. Algo que me hace crecer y me enseña cosas nuevas cada día.
Empatía.
El poder de identificarme con otra persona. Saber lo que piensa alguien y lo que siente en cada momento, por ser algo que yo misma he vivido y sentido.
Pero no es fácil ponerse en la piel de quien no conocemos.
A veces son nuestras propias palabras o nuestros gestos los que delatan nuestros sentimientos. Como un libro abierto al mundo, esperando a ser leídos.
Ese es mi superpoder. Y no lo cambiaría por nada.
Imagina ser invisible, retroceder en el tiempo o leer la mente. Podrías evitar miradas molestas, enmendar aquellos errores que más te pesan y saber en todo momento quién te miente y quién no.
Os imagináis a vosotros mismos salvando el momento, el mundo. Aquellas cosas imposibles y grandiosas en las que podríais emplear esos dones. La capacidad de salvar a alguien de una situación desafortunada. La satisfacción de ser los héroes. La sensación de responsabilidad por algo que merece la pena...
Hoy he descubierto que tengo un superpoder.
Algo que me define, que es únicamente mío. Algo que forma parte de mí y que se me da bien sin la necesidad de esforzarme. Algo que me hace crecer y me enseña cosas nuevas cada día.
El poder de identificarme con otra persona. Saber lo que piensa alguien y lo que siente en cada momento, por ser algo que yo misma he vivido y sentido.
Pero no es fácil ponerse en la piel de quien no conocemos.
A veces son nuestras propias palabras o nuestros gestos los que delatan nuestros sentimientos. Como un libro abierto al mundo, esperando a ser leídos.
Ese es mi superpoder. Y no lo cambiaría por nada.
lunes, 25 de marzo de 2013
Víctima y verdugo.
¿Ser víctima y verdugo a la vez?
Víctima de otros y verdugo de uno mismo.
Víctima de uno mismo, y verdugo de otros.
Lo mismo da.
Ya no hay diferencia.
Nunca quise ser víctima, pero no soy quien para ser verdugo.
Dejaré que la lluvia lo lave todo, para no ser gato ni ratón.
Y cuando por fin pare de llover, seré la piedra que siempre quise ser.
Víctima de otros y verdugo de uno mismo.
Víctima de uno mismo, y verdugo de otros.
Lo mismo da.
Ya no hay diferencia.
Nunca quise ser víctima, pero no soy quien para ser verdugo.
Dejaré que la lluvia lo lave todo, para no ser gato ni ratón.
Y cuando por fin pare de llover, seré la piedra que siempre quise ser.
Y yo cual presa.
Tú, ingenuo, te crees que lo tienes todo pero no ves lo que te falta.
Tú, iluso, que regalando besos esperas un milagro.
Tú que gritas con la boca tapada para no oírte a ti mismo.
Tú, que vanidoso, sólo buscas piropos,
sin diferenciar abrazo de guantazo, ni risa de burla.
Tú, caprichoso, que lo quieres todo a tu gusto y antojo,
y no ves más allá de tus propios ojos.
Tú que enamorado del espejo pecas de inseguro.
Tú que cierras las puertas a golpes.
Tú que no entiendes lo que tocas y no comprendes lo que miras.
Tú que juzgas, con los zapatos grandes.
Tú que desconoces el precio de mi error.
Tu que vas por el camino equivocado, y no diferencias lo bueno de lo malo.
Tú, que quieres ser el centro del mundo, porque te sientes pequeño.
Tú que observas y miras desde lejos.
Tú cual cazador. Y yo cual presa.
Tú, iluso, que regalando besos esperas un milagro.
Tú que gritas con la boca tapada para no oírte a ti mismo.
Tú, que vanidoso, sólo buscas piropos,
sin diferenciar abrazo de guantazo, ni risa de burla.
Tú, caprichoso, que lo quieres todo a tu gusto y antojo,
y no ves más allá de tus propios ojos.
Tú que enamorado del espejo pecas de inseguro.
Tú que cierras las puertas a golpes.
Tú que no entiendes lo que tocas y no comprendes lo que miras.
Tú que juzgas, con los zapatos grandes.
Tú que desconoces el precio de mi error.
Tu que vas por el camino equivocado, y no diferencias lo bueno de lo malo.
Tú, que quieres ser el centro del mundo, porque te sientes pequeño.
Tú que observas y miras desde lejos.
Tú cual cazador. Y yo cual presa.
miércoles, 20 de marzo de 2013
Y no sé qué es...
No dejo de preguntarme qué es lo que ha hecho que hoy no seas más que una piedra con cicatrices de guerra. Te has perdido por el camino y no sabes ni dónde estás, ni hacia dónde vas... No distingues un error de una oportunidad.
Pero lo quieres todo, aunque te canses de ello a los dos minutos.
Y me da pena. Pena por que ni siquiera tratas de saborearlo. Por que no te ilusiona. Por que no lo intentas.
Y te entiendo...
Aunque no sepas distinguir lo que te gusta de lo que te estorba; por que yo también estoy en el camino.
Esto lo escribí para tí, cuando aún te olía en mi ropa.
Pero lo quieres todo, aunque te canses de ello a los dos minutos.
Y me da pena. Pena por que ni siquiera tratas de saborearlo. Por que no te ilusiona. Por que no lo intentas.
Y te entiendo...
Aunque no sepas distinguir lo que te gusta de lo que te estorba; por que yo también estoy en el camino.
Esto lo escribí para tí, cuando aún te olía en mi ropa.
sábado, 23 de febrero de 2013
Pero qué sabré yo...no?
Mientras tú la ignoras y la llamas únicamente para pasártelo bien, sin preguntar si quiera qué tal está, ella lleva una semana esperando que le hables aunque sea para saber como le va.
Mientras tú ignoras cuando te habla porque no te apetece hablar con ella, a ella le ha costado un esfuerzo hablarte aunque sabe que no vas a contestar.
Mientras tú le haces creer que estás interesado en ella, en conocerla y en algo más que el sexo, ella se lo cree, y se ilusiona.
Mientras tú pasas de ella porque no quieres nada más que un buen rato cuando a ti te apetece, ella siempre está disponible para ti.
Mientras tú te haces grande porque sabes que le gustas y lo aprovechas para tus antojos, ella se hace pequeña porque en el fondo se da cuenta de que eso no va a cambiar
Mientras tú finalmente demuestras que no te interesa ella intenta exculparte, y excusarte de cada uno de los desprecios que ve.
Mientras a ti te da igual todo lo que pase o no, ella se raya en su casa y se distrae, sin hacer nada en condiciones, porque se preocupa.
Mientras tú te crees que la tienes en la palma de la mano y que la puedes usar cuando quieras, ella ya se ha dado cuenta de tus intenciones.
Y mientras tú crees que sigue ahí... ella ya se ha ido.
Pero qué sabré yo... si sólo soy "esa chica".
domingo, 17 de febrero de 2013
Cuando no hay nada más que decir...
martes, 12 de febrero de 2013
Ese vacío en el pecho.
Será que hoy estoy sensible. Será que no tengo un buen día, ni una buena semana, ni un buen mes... Será que al acordarme de ti se me despiertan las lágrimas. Pienso en la injusticia, la muerte, Dios, el dolor, la falta y el tiempo, que me hacen un nudo en la garganta.
Ha sido ver tus fotos y sentirte al lado... como cuando me sentaba contigo en el sofá y nos dormíamos la siesta abrazados. Como cuando jugaba con tus manos, morenas y arrugadas de tanto trabajar. Como cuando me hacías de rabiar y metías mi mano en el plato manchándomela entera... Lo que daría por que lo hicieses otra vez.
Me acuerdo de tus meriendas de melón y sandía mientras veías las películas del oeste, del día que me quitaste mi primer diente de leche, de los Phosquitos que me comprabas y que todavía hoy me sacan una sonrisa porque recuerdan a ti.
De tu colonia; esa que te ponías los domingos después de afeitarte mientras miraba embelesada cómo te recortabas el bigote.
Me acuerdo de esos ocho bolos, y sobre todo, me acuerdo de esa última nochevieja. De ti. De tus ganas de vivir.
Siempre me imagino cómo hubiesen transcurrido todos estos años que te llevo echando en falta, la de veces que me habría enfadado contigo por no dejarme salir, la de castigos que me habría llevado, y también alguna torta que otra. Lo que hubiese sido crecer contigo.
Lo diferente que sería todo... Cómo sería no tener este vacío, este agujero en el pecho.
Porque el día que te fuiste, algo de mí se fue contigo.
Y solo quiero que sepas que hubiese cumplido mi promesa.
Ha sido ver tus fotos y sentirte al lado... como cuando me sentaba contigo en el sofá y nos dormíamos la siesta abrazados. Como cuando jugaba con tus manos, morenas y arrugadas de tanto trabajar. Como cuando me hacías de rabiar y metías mi mano en el plato manchándomela entera... Lo que daría por que lo hicieses otra vez.
Me acuerdo de tus meriendas de melón y sandía mientras veías las películas del oeste, del día que me quitaste mi primer diente de leche, de los Phosquitos que me comprabas y que todavía hoy me sacan una sonrisa porque recuerdan a ti.
De tu colonia; esa que te ponías los domingos después de afeitarte mientras miraba embelesada cómo te recortabas el bigote.
Me acuerdo de esos ocho bolos, y sobre todo, me acuerdo de esa última nochevieja. De ti. De tus ganas de vivir.
Siempre me imagino cómo hubiesen transcurrido todos estos años que te llevo echando en falta, la de veces que me habría enfadado contigo por no dejarme salir, la de castigos que me habría llevado, y también alguna torta que otra. Lo que hubiese sido crecer contigo.
Lo diferente que sería todo... Cómo sería no tener este vacío, este agujero en el pecho.
Porque el día que te fuiste, algo de mí se fue contigo.
Y solo quiero que sepas que hubiese cumplido mi promesa.
lunes, 11 de febrero de 2013
Pero nunca he sido una cobarde...
Dicen que el corazón tiene razones que la razón no entiende...
¿Y será verdad que no todo es blanco o negro...?
La cabeza me dice todo lo contrario de lo que me dice el corazón, en un intento de protegerlo contra cualquier bombardeo de mentiras. Mentiras que hacen temblar el muro que tanto dolor me ha costado construir.
Y sé que la razón la lleva mi cabeza, todas las pruebas apuntan a ello, pero no puedo evitar que hay algo empujándome en la dirección opuesta. Como una balanza en la que sin motivo alguno la opinión del corazón pesa mucho más. Y digo sin motivo alguno por que es así... No tengo ningún tipo de excusa, ni prueba a su favor, ni nada.
¿Es un capricho entonces?
¿O es eso que llamamos instinto? ... Instinto que suele fallar siempre en favor de todas esas cosas que debía haber tenido en cuenta antes de poner el corazón en la balanza...
Pero... nunca he sido una cobarde. Nunca he dejado que nadie me acolche la caída. Siempre que me levanto estoy preparada para caerme otra vez.
Hay quien lo llama estupidez, ganas de sufrir y pasarlo mal.
Yo lo llamo valentía; el poder de disfrutar las cosas hasta que realmente se acaban, el poder de arriesgar lo poco que tienes por el simple hecho del disfrute momentáneo del presente. Por no arrepentirme nunca de algo que no ha sucedido y pensar "¿qué habría pasado?".
Otras veces lo llamo masoquismo, y pienso que simplemente soy más feliz cuando aprovecho todas las oportunidades,y que si lo paso mal es por que al menos lo he intentado, y disfruté del camino.
Y precisamente porque nunca he sido una cobarde; disfrutaré del camino, aunque sea corto.
¿Y será verdad que no todo es blanco o negro...?
La cabeza me dice todo lo contrario de lo que me dice el corazón, en un intento de protegerlo contra cualquier bombardeo de mentiras. Mentiras que hacen temblar el muro que tanto dolor me ha costado construir.
Y sé que la razón la lleva mi cabeza, todas las pruebas apuntan a ello, pero no puedo evitar que hay algo empujándome en la dirección opuesta. Como una balanza en la que sin motivo alguno la opinión del corazón pesa mucho más. Y digo sin motivo alguno por que es así... No tengo ningún tipo de excusa, ni prueba a su favor, ni nada.
¿Es un capricho entonces?
¿O es eso que llamamos instinto? ... Instinto que suele fallar siempre en favor de todas esas cosas que debía haber tenido en cuenta antes de poner el corazón en la balanza...
Pero... nunca he sido una cobarde. Nunca he dejado que nadie me acolche la caída. Siempre que me levanto estoy preparada para caerme otra vez.
Hay quien lo llama estupidez, ganas de sufrir y pasarlo mal.
Yo lo llamo valentía; el poder de disfrutar las cosas hasta que realmente se acaban, el poder de arriesgar lo poco que tienes por el simple hecho del disfrute momentáneo del presente. Por no arrepentirme nunca de algo que no ha sucedido y pensar "¿qué habría pasado?".
Otras veces lo llamo masoquismo, y pienso que simplemente soy más feliz cuando aprovecho todas las oportunidades,y que si lo paso mal es por que al menos lo he intentado, y disfruté del camino.
Y precisamente porque nunca he sido una cobarde; disfrutaré del camino, aunque sea corto.
martes, 5 de febrero de 2013
Esa chica.
Y lo diré una y otra vez: no quiero ser esa chica.
Esa a la que llamas a tu antojo cuando tienes hambre.
Que no quiero ser esa chica que se queda esperando a que des señales de vida. Esperando un simple gesto tuyo... esperando algo que no va a suceder.
No quiero ser esa chica a la que tomas por tonta y mientes cada vez que respiras. No quiero ser la que se cree tus mentiras, o la que se hace la tonta y las ignora.
Estoy harta de tener que convencerme a mí misma de que merezco algo mucho mejor que eso.
Harta de ser la que confía, la que se entrega, la que va con buenas intenciones.
Harta de ser la que siempre acaba sufriendo: la que se rompe.
Harta de sentirme culpable.
Y todo, por que no quiero ser "esa chica".
Esa a la que llamas a tu antojo cuando tienes hambre.
Que no quiero ser esa chica que se queda esperando a que des señales de vida. Esperando un simple gesto tuyo... esperando algo que no va a suceder.
No quiero ser esa chica a la que tomas por tonta y mientes cada vez que respiras. No quiero ser la que se cree tus mentiras, o la que se hace la tonta y las ignora.
Estoy harta de tener que convencerme a mí misma de que merezco algo mucho mejor que eso.
Harta de ser la que confía, la que se entrega, la que va con buenas intenciones.
Harta de ser la que siempre acaba sufriendo: la que se rompe.
Harta de sentirme culpable.
Y todo, por que no quiero ser "esa chica".
No es verdad.
No es verdad que me ha vuelto a pasar.
No es verdad que llevo escrito ingenua en la frente, y que con cada palabra que digo permito que no me tomen en serio.
No es verdad que me gustaba.
No es verdad que en el fondo lo supiera. Que supiera que eran solo palabras sin sentido alguno, que salían de su boca y me endulzaban el oído. Y no es verdad que me gustara.
No es verdad que en realidad lo vi venir. Que desde el momento en que empezó supe que no era real, que no acabaría bien. Que era todo zalamería. Que era todo mentira.
Ingenua, tonta, inocente, estúpida, boba, necia, mema...
No es verdad que no quise creerlo.
No es verdad.
No es verdad que llevo escrito ingenua en la frente, y que con cada palabra que digo permito que no me tomen en serio.
No es verdad que me gustaba.
No es verdad que en el fondo lo supiera. Que supiera que eran solo palabras sin sentido alguno, que salían de su boca y me endulzaban el oído. Y no es verdad que me gustara.
No es verdad que en realidad lo vi venir. Que desde el momento en que empezó supe que no era real, que no acabaría bien. Que era todo zalamería. Que era todo mentira.
Ingenua, tonta, inocente, estúpida, boba, necia, mema...
No es verdad que no quise creerlo.
No es verdad.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)














